tan lejos,
con las ideas tan frías,
tan pálida mirando
al cielo de las auroras boreales...
6 segundos,
lo que tardé en hacerte un ramo de pensamientos (si no eran de él, nunca habrían de gustarte)
Una hoja seca al desnudar tu voz,
una pisada en la acera
de un mes de octubre
es lo que quise del día.
Lo que quisiera el otoño
es callarse, medir su mala memoria de voces por la calle, su delirio amarillo
de meses tumbado si nada que hacer
dibujando un retrato de mí que ya no existe. La vida se escribe encima de los tejados, ese soy yo, tú y nosotros somos los gatos de Madrid